Publicidad

MAXIMILIANO RISSO CONSTRUYE SU FUTURO DÍA A DÍA

Publicidad

 

 

 

Córdoba, 3 de Abril de 2015.- Maximiliano Risso es uno de los jóvenes valores de la Fórmula Renault Plus que cumple la doble función de piloto y preparador. Con una trayectoria que se ha visto interrumpida en su regularidad por causa de los avatares económicos, “Maxi” no baja los brazos y reconstruye día a día su presente deportivo en el galpón de materiales de construcción que posee su padre Raúl.

 

Lejos de preparar su monoplaza Crespi XXV Nro25 en un “taller laboratorio”, Maximiliano y su padre Raúl llevan adelante su pasión dentro de la estructura del negocio relacionado a la construcción, ganándole lugar a los materiales acopiados en el depósito en donde preparan el flamante auto comprado hace pocos días.

 

–      ¿La pasión de papá Raúl puede más que los compromisos comerciales?

 

Seguro (indica Maximiliano con su sonrisa inalterable). Hace poco más de un año mi viejo armó la planta hormigonera y ahí compartimos el negocio y el taller. Teníamos un auto y ahora compramos un nuevo toscano así que cada vez le vamos ganando más lugar al depósito de materiales. Mi papá corrió en TC4000 Santafesino y le apasiona el automovilismo. Desde el 2012 que arrancamos con equipo propio lo hacemos todo nosotros como en su época cuando se hacían las Peñas. Por supuesto no estamos solos, en el taller o en carrera nos dan una mano Jorge, Sergio, Agustín, mi tío Fabián, Mauricio, Emanuel y hasta hace poco Ricardo. Son todos amigos y lo hacen en su tiempo libre. Es más, algunos de ellos fueron mecánicos de mi papá cuando corría y hoy me cargan porque en esa época yo los molestaba y les sacaba las herramientas para jugar.

 

 

–      Más allá de esa pasión transmitida por tu padre ¿Cómo te iniciaste en el automovilismo?

 

Cuando tenía 12 años, empezó cómo un capricho. Yo miraba el karting por televisión y le empecé a decir a mi papá que quería correr, nunca me había subido a uno pero yo quería correr. Así que alquilamos uno y fuimos a una carrera pero ese karting era malísimo así que terminamos comprando uno y arrancamos en un torneo santafesino en donde también empezaron Facundo Ardusso y Alan Castellano entre otros. Después fuimos a la FRSantafesina y ahí me tocó competir con el “conejo” Bailone y Fabricio Fernández. Nos sacábamos chispas con Bailone.

 

 

–      ¿Cómo se llega a la FRPlus?

 

La conocimos y nos gustó. Nos pareció muy competitiva y con muchos pilotos buenos que algunos conocía del karting. Debuté en la penúltima fecha del 2011 con el equipo de Mandrini. A partir del 2012 ya lo hicimos con el equipo propio: “Risso Competición”. No tuvimos regularidad por una cuestión económica, más cuando mi viajo necesitó la plata para abrir la hormigonera. En el 2013 chocamos el auto en una largada en Alta Gracia en que se quedó parado Abratte, lo arreglamos nosotros mismos y seguimos el campeonato con ese auto. Volvimos y hasta se obtuvieron buenos resultados., pero en esta temporada nos dimos cuenta que había que comprar uno nuevo y acá estamos… armándolo.

 

 

–      ¿Con una estructura propia y trabajando en tiempos libres, se es competitivo?

 

Sí, se puede. Acá en la FRPlus ves que hay estructuras muy bien armadas con tres o cuatro autos y muchos como nosotros que lo hacen de manera privada y a fuerza de pulmón. Y así y todo se ven muy buenas carreras en las cuales se pelea por la pole y por la victoria. La pole de la última carrera del año pasado la hizo Luciano Carrera y en la Súper Clasificación de la última carrera se metió Eugenio Provens. Ellos también trabajan cómo nosotros y ahí están. La FRPlus es muy competitiva hay muy buenos pilotos y equipos en un nivel parecido. Nosotros este año aún no probamos y por ahora no lo podemos hacer. Los chicos que trabajan en el equipo tienen sus trabajos y lo hacen fuera de ese horario o los feriados. De todas formas sabemos lo que podemos dar. Nuestro objetivo con éste auto 0km para las próximas dos carreras es estar entre los diez.

 

Con el apoyo incondicional de su familia, su novia Silvia, sus amigos, los sponsor y el empuje de la ciudad santafesina de El Trébol, Maximiliano Risso no baja los brazos y deja en claro su parecer con una frase que resume lo que para muchos pilotos es una forma de vida: “el automovilismo me dio mucho. Me dio amigos que conocí cuando era chico y hoy conservo. Rivales en pista que son amigos en la vida. Me dio la fuerza y confianza para salir a pelear por lo mío y golpear puertas para pedir apoyo y seguir con ésta pasión. Por eso digo que me dio mucho y lo disfruto cada fin de semana de carrera compartiendo lo poco o mucho con mi familia y amigos”.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *